Vegetalizar los tejados presenta numerosas ventajas, tanto en el plano del desarrollo sostenible, como en una perspectiva de protección de la biodiversidad y del medio ambiente en medio urbano.
Gestión de aguas pluviales
La urbanización creciente de las ciudades crea superficies impermeabilizadas cada vez más importantes, que no absorben el agua de lluvia. Las cubiertas ajardinadas permiten disminuir y regular la cantidad de aguas pluviales que llegan a un edificio y luego se vierten a la red pública de evacuación.
Una parte del agua de lluvia es absorbida por el complejo de vegetalización (sustrato y vegetación) hasta “la saturación y consumida por las plantas por evapotranspiración. Una vez saturado, el complejo de vegetalización permite ralentizar l” a evacuación del agua en las redes. La cubierta ajardinada absorbe las puntas de precipitaciones (“efecto retardado”) y limita así la saturación de las canalizaciones durante las tormentas violentas.
LE PRIEURE ha desarrollado soluciones complementarias para gestionar las aguas pluviales en la cubierta: ALVEO y OASIS. Estas soluciones están dimensionadas por nuestro software GEPETO y acompañadas de un estudio hidráulico.
Confort térmico
Las diferentes capas del complejo de vegetalización (drenaje, filtro, sustrato y vegetación) aportan una capa de aislamiento térmico adicional en el tejado, protegiendo el edificio del frío en invierno y luchando contra el efecto de islas de calor urbano en verano. Los mecanismos de evapotranspiración, de sombreado y de reflexión de las plantas que componen la cubierta vegetal, permiten así reducir la temperatura de un edificio en caso de fuerte calor.
El estudio de Environment Canada (ministerio del Medio Ambiente canadiense) sobre la ciudad de Toronto realizado en 2004 ha demostrado que una vegetalización de 6,5 km2 de cubiertas de esta ciudad permitiría:
- reducir la temperatura ambiente de 1 a 2°C en los períodos más cálidos
- eliminar cada año 2,18 toneladas de gases de efecto invernadero y treinta toneladas de contaminantes.
Confort acústico
Las capas de sustrato y de vegetación del complejo vegetal amortiguan los ruidos de impacto (lluvia, granizo, etc.) y reducen el volumen percibido por los ruidos aéreos.
Prolonga la vida útil de los tejados
Al proteger la membrana de estanqueidad contra los choques térmicos y las agresiones (UV, punzonamiento), las cubiertas ajardinadas contribuyen a prolongar la vida útil de los tejados.
Mejora la calidad de vida de los ciudadanos
Verdadero «pulmón verde» en la ciudad, el tejado vegetal contribuye a luchar contra la contaminación; las plantas liberan oxígeno, absorben el dióxido de carbono y fijan las partículas de polvo contenidas en el aire. Devolver la naturaleza a los medios urbanos permite también una mejor integración de los edificios en su entorno: la ciudad es más bella y el marco de vida de los ciudadanos más agradable.
Favorece la biodiversidad
Al reintegrar espacios verdes en el entorno urbano, los tejados verdes restauran las funcionalidades ecológicas degradadas por la urbanización. La capa de sustrato, los vegetales diversificados y adaptados al clima local y la adecuación de zonas refugio favorecen el retorno y el desarrollo de la fauna y de la flora en la ciudad.